Top 5: lugares para ver los cerezos en flor en Japón

Las joyas de la isla florecen con la primera brisa primaveral. La todavía oscura y desnuda corteza del cerezo japonés tras el impacto invernal comienza a brotar entre las piedras de la orilla de los ríos, vías de tren y entre el césped. Los florecientes bulbos se amontonan formando improvisados ramos. La corteza, aún débil, contrasta con la imagen uniforme y renovada de las flores y entre medias, el sol brilla sobre las ramas de lo que aparenta ser una densa capa de nieve con matices rosas que deriva en un impactante y contradictorio efecto visual.

Aquí confluyen poesía antigua intensificada por paisajes de castillos y campos de batalla con un presente protagonizado por escolares corriendo por las calles hacia el que será su primer día de colegio. Son esculturas vivientes contando historias del ayer y del hoy y que merecen cada efímero momento.

Aquí tienes las mejores opciones para visitar los cerezos en flor en Japón

¿Quieres conocer los mejores lugares desde los que observar los cerezos? ¡No te pierdas ni una línea de lo que viene a continuación!

1. Cerezos en flor en Shinjuku Gyoen National Garden, Tokyo

Este es uno de los más famosos enclaves “hanami” (lugares para observar las flores) del país debido a su proximidad a la capital japonesa. Ubicada al este de la estación de Shinjuku, Shinjuku Gyoen se llena cada primavera de locales y turistas en busca del lugar perfecto para hacer un picnic bajo la belleza de los cerezos en flor.

Las abundantes y amplias zonas verdes convierten a este área natural en una rareza por su localización en una de las ciudades con mayor densidad de población del planeta. Las casas están rodeadas por jardines de abundante césped repleto de varias y coloridas especies de sakura, la flor del cerezo. Basta un paseo para descubrir pequeñas áreas forestales plagadas de este tipo de flores y lagos llenos de patos, algunos ataviados con encantadores puentes con parejas haciéndose “selfies”.

Desde la entrada hasta el céntrico Starbucks uno puede encontrar aquí todo tipo de público durante los días de máxima floración. Asegúrate de acudir con tiempo ya que se pueden formar grandes colas a la entrada. No en vano, hablamos de uno de los lugares más buscados de Tokio.

2. Cerezos de Yamanakadani Station, Osaka 

Un “sube y baja” en la línea Osaka Loop, en la estación de Osaka, nos llevará hasta Yamanakadani, ya en la prefectura de Wakayama. En un abrir y cerrar de ojos habrás llegado a tu destino.

El propio andén simboliza lo que hemos venido a visitar aquí. Históricamente llena de fotógrafos entusiasmados, la estación se encuentra rodeada de cerezos en flor durante la época de floración que explotan en intensos tonos rosas. La combinación de estas flores con los trenes que llegan a la estación rematadas por las verdes colinas del fondo configuran otra de las imponentes paradas de este Sakura Tour. Relájate en los bancos del andén, observa la estampa descrita desde el puente que cruza los andenes o descansa en el parque ubicado a pocos metros al este de la estación. ¡También puedes montarte en el tobogán con forma de dinosaurio!

Recuerda, estamos ante una pequeña ciudad japonesa, “la verdadera Japón”, como algunos prefieren decir. Sin embargo, estamos a tiro de piedra de la siguiente parada en el itinerario. En realidad, pilla de camino.

3. Descubriendo los cerezos en Wakayama Castle, Wakayama

Toda observación de la floración requiere un lugar a la altura, y el castillo de Wakayama es la Fortaleza donde encontrarlo.

Ya sea a pie o en autobús desde la estación de Wakayama en la ciudad homónima, al sur de Osaka, llegaremos a la zona del castillo donde, durante la primavera, se celebran festivales de comida local al tiempo que florecen los cerezos. Por eso ya el trayecto desde las faldas del castillo resulta apasionante. Enormes y gruesos árboles dan cobijo a jóvenes parejas que comparten bananas de chocolate mientras disfrutan de tan imponente estructura.

El castillo por sí mismo merece una visita que culmina con una estupenda panorámica desde el punto más alto. Hasta entonces, seguramente seas “víctima” de unos cuantos actores vestidos de Ninja. Pese a tratarse de una ciudad relativamente pequeña, Wakayama es disfrutable incluso cuando está atestada de visitantes.

Recomendamos pasar al menos una tarde completa para sentir las vibraciones de tan animado enclave.

4. Floración en Hiroshima Peace Park, Hiroshima

Localizada en la parte oeste de Japón, hablamos de una ciudad que no necesita introducción. Es el parque de la Paz de Hiroshima un vestigio de la resiliencia, o antes de la Segunda Guerra Mundial un distrito de compras convertido en memorial de la bomba atómica y un jardín reclamo de la paz mundial, que cuenta historias pasadas de la ciudad mezcladas con un optimista futuro bebiendo tanto del diseño del parque como del encanto de sus visitantes. Cada primavera, la población local visita el parque para relajarse a los pies del río con extraordinarios cerezos en flor.

Toda la isla ubicada en el centro del parque está rodeada por cerezos en flor con su incomparable majestuosidad y grosor. Árboles que estallan en un espectáculo floral al que siempre asisten multitudes ataviadas con sábanas sobre las que llevar a cabo un reponedor picnic. Así que mejor llegar pronto para coger sitio. De todas formas, cada centímetro de este parque Patrimonio Mundial, desde el Museo Memorial de la Paz de Hiroshima hasta la Cúpula de Genbaku, es visitable durante todo el año. Sobre todo asegúrate de marcharte con embriagadores recuerdos como hacen los más acérrimos del parque.

Bonus para visitar los cerezos en flor: Parque Senzokuike, Tokio

Sólo una más para exprimir al máximo la capital. El Parque Sezokuike, localizado justo a las afueras de la estación de Senzokuike (línea Igekami), es una excelente alternativa para los que buscan relajarse en lugares menos congestionados. Ubicado en el sureste del barrio de Ota, el parque alberga un pequeño lago por el que navegan parejas en pequeñas barcas y canoas de alquiler.

El extremo norte del parque tiene un puñado de pequeños paseos por bosques de cerezos con riberas por testigo idóneas para realizar un picnic. No olvides cruzar hasta la isla del lago, una réplica de Itsukushima (la isla ubicada en la Bahía Norte de Hiroshima), antes de marcharte. Una vía de escape muy recomendable para los que buscan refugio frente al bullicio de la capital.

5. Kintai Bridge y sus cerezos en flor, Yamaguchi

A 20 minutos en tren bala (shinkasen) desde la estación de Hiroshima (algo más con los trenes estándar) se encuentra Iwakuni, una pequeña ciudad especial por sus tradiciones y belleza natural.

Es una de las ciudades más orientales de la provincia de Yamaguchi y en ella el río Nishiki ha dibujado un extraordinario paisaje rematado durante décadas por la ornamentación de sus habitantes. Gracias a un autobús que parte de la estación alcanzas un lugar de los que quitan el hipo e imperdible en cualquier época del año, si bien es en primavera cuando todo se tiñe de color rosa. El puente Kintai es un puente de madera y cinco arcos que impresiona se mire desde donde se mire. Conduce al parque Kikko –un parque ajardinado rodeado de senderos montañosos y un teleférico que permite visitar un castillo ubicado en la cima. ¿Hemos captado ya tu atención?

Un paisaje de ensueño. Árboles frondosos, gruesas ramas en flor y un río repleto de pequeñas barcas protagonistas de la tradición de la pesca del cormorán, que se realiza por la noche bajo la luz de antorchas. El parque situado en el centro resulta maravilloso por albergar diferentes rincones para la relajación y que rodean a una verde y floreada explanada central en la que no es raro ver corretear a los más pequeños.

Coge el teleférico (o sube a pie si te ves con fuerzas) al castillo Iwakuni para un tour alrededor de esta pequeña construcción que conduce a una no tan pequeña vista de toda la ciudad. Un lugar particularmente recomendable y memorable.

Asegúrate de visitar el museo Shirohebi (serpiente blanca) para asomarte a un pedacito de la historia local y ver algunas de las serpientes (salvo que tengas miedo a estos reptiles). Hay mucho por ver y hacer aquí con numerosos vendedores ambulantes de comida y café para reponer fuerzas. En resumen, una escapada de un día y un lugar destacado de este tour Sakura.

¿Listo para viajar y rodearte de la belleza de los cerezos en flor?

¡Reserva con nosotros! Tenemos tours guiados durante todo el año, puedes consultarlos aquí.

¿Quieres añadir una visita a un Patrimonio de la UNESCO en tu viaje a Wakayama? Hazlo con nuestro Mt. Koya World Heritage Tour.

O quizá quieras saber más del rey de los patrimonios mundiales, Hiroshima. No te pierdas nuestro tour Hiroshima y Miyajima en un día.